El asombro como herramienta para la educación

En el marco del VII Congreso Internacional de Educación, organizado por la Facultad de Humanidades de la Universidad Católica de Santa Fe, la investigadora y autora del libro “Educar en el asombro”, Catherine L’Ecuyer, brindó una conferencia a representantes de instituciones y organizaciones vinculadas al ámbito de la cultura de la ciudad de Santa Fe.

Participaron representantes de la Sociedad de Beneficiencia del Hospital José María Cullen, Asociación Cultural Inglesa, Club de Leones de Santa Fe, Asociación Conciencia, Jerárquicos Salud, Rotary Club Santa Fe; Jardín San Plablo, SPAI, CILSA, ADUC, Cooperativa Setúbal, Facultad Regional Santa Fe UTN, Banco Comafi, Colegio de Psicopedagogos, Fundación Renacer, Bolsa de Comercio, Instituto de Estudio Superiores, así como docentes, padres y madres de familias. Durante más de una hora los más de 80 asistentes estuvieron atentos a la exposición.

Antes de su ponencia, la decana de la Facultad, Anabel Gaitán, agradeció la respuesta a esta convocatoria que surge en el marco de celebración de un año de trabajo y un congreso de educación católica, convocado por la Iglesia y  que tendrá lugar en Roma en el mes de noviembre de este año.

“El documento preparatorio para el congreso ha declarado que la cultura se encuentra en una emergencia educativa y que solamente todos los que participamos de la cultura, desde distintos roles, podemos colaborar en la solución ante esta emergencia en que se encuentra la educación” indicó.
En este sentido señaló que “desde este lugar nos pareció muy interesante invitarlos a ustedes, que representan distintos ámbitos de la cultura, como organizaciones, colegios profesionales, empresas, instituciones que día a día se encuentran con esta misma problemática”.


El asombro
Por su parte la expositora Catherine L’Ecuyer centró su exposición en el tema del Asombro en los niños y su relación con la educación. “Sorprenderse por las cosas como son; el asombro como deseo para el conocimiento; como sentido para la motivación” fueron las primeras consignas que lanzó ante los participante.

Ante esta consigna señaló que “todos debemos plantearnos como respetar ese asombro, que no es algo que se inculca, ya que nacemos con él, y por lo tanto es algo que se respeta. Esto es lo primero que tenemos que hacer: respetarlo”.

Más adelanto citó a Santo Tomás de Aquino: “Hay dos manera de adquirir conocimiento, por mención y descubrimiento, y por disciplina y aprendizaje. La primera es el modo más elevado y la otra viene en segundo lugar” ante lo cual indicó que para alcanzar la primera hay que respetar el Silencio, porque sin silencio no se puede conseguir el conocimiento, no se puede pensar.

Asombro y rutina
Ahora bien para respetar el asombro en el niño debemos también respetar sus ritmos y las etapas de la infancia. En este sentido y nuestra cultura, “con el consumismo, el niño da por supuesto el mundo y esto es la forma más rápida de quitarle el asombro, y así no dejamos que los chicos deseen las cosas. Son los niños NiNi, por haber tenido todo sin desearla. Con esto los sentidos se saturan y el niño deja de sentir y de disfrutar de las cosas sencillas de la vida. Porque cuando los niños tienen los sentidos bloqueados, viven en un mundo ajeno a la belleza”.

Más adelante planteó la consigan “el asombro es lo que da sentido a la rutina. Porque la rutina, eso que hacemos todos los días genera hábitos. La rutina adquiere tiene sentido cuando las cosas se hacen por el asombro y no cuando se hacen porque sí y de forma mecánica. Aquí es cuando la rutina no tiene sentido”.